Las bibliotecas populares de nuestro país, tuvieron su origen por la iniciativa de personas visionarias de nuestra historia, que apostaron al futuro, al crecimiento y al bienestar de la sociedad. Fue durante la presidencia de Domingo F. Sarmiento, que el 23 de septiembre de 1870 se sancionó la ley 419, hoy ley 23351, la que dio origen a la Comisión Nacional Protectora de Bibliotecas Populares y que nació con la misión de fomentar y promover la fundación y mejoramiento de las bibliotecas populares en todo el territorio de la Nación. Así surge en Chivilcoy, por iniciativa de Juana Manso el 10 de noviembre de 1866, la primera Biblioteca Pública, que por problemas políticos dejó de funcionar; resurgiendo luego con Carlos Fajardo en 1872, contando con Reglamento Interno y Estatuto propio, pero debido a los problemas que afectaban al país, entró en decadencia. Reapareció en el año 1894, por iniciativa de un grupo de vecinos encabezados por el Dr. Antonio Novaro, Sebastián Barrancos, Sr. Juan. M. Díaz, Dr. Alejandro Guerz, Irineo A. Moras y Sr. Martín Mindurry. Es a partir del 14 de julio de 1895, que se declara solemnemente la entrega al pueblo y librada público, y de ahí en más en forma continuada hasta nuestros días.

La biblioteca tuvo distintas sedes, en sus comienzos alquiladas y luego propias; a medida que iban creciendo las necesidades de mayores espacios para una mejor atención al público lector, se hacía necesario hacer más comodidades hasta llegar a la sede actual en la calle Moreno 30, predio donado por el Sr. Luis H. Martelletti y Sra., contándose desde entonces con un amplio y cómodo edificio para beneficio y servicio de varias generaciones de chivilcoyanos.

El caudal bibliográfico en la actualidad supera los 110.000 ejemplares; además posee colecciones de diarios antiguos y actuales, revistas, videos, casetes, CD Rooms y un sistema en red formado por 6 computadoras.

La Institución en el mes de Junio de 2005, adquirió el Pérgamo: Software para Gestión Integral de Bibliotecas y Centros de Documentación, que entre sus variadas funciones podemos nombrar: préstamo, devolución, reserva, renovación, consulta, historial de movimientos y la consulta pública ‘On-Line’, que permite buscar información en el acervo documental incluyendo la disponibilidad.

La concurrencia de estudiantes y lectores fue siempre numerosa y su actividad múltiple: visitas guiadas para escolares y particulares, ayuda escolar, diversos talleres y una amplia actividad cultural: conferencias, conciertos, charlas, exposiciones a cargo de personalidades destacadas nacionales y locales, siendo reconocida tanto a nivel local, como nacional y obteniendo distintas distinciones, por lo que se halla ubicada en primera categoría entre las 2000 Bibliotecas Populares de la República Argentina. 
 
La Biblioteca Popular “Dr. Antonio Novaro” es autónoma, contando para su mantenimiento con el recurso genuino de la cuota mensual de sus socios, un subsidio mensual de la Dirección de Bibliotecas de la Provincia de Buenos Aires y un subsidio anual de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares, por lo que es grande el esfuerzo que realiza para su sostenimiento y no dejar de avanzar al ritmo de los tiempos modernos.